El TNT es el “trinitrotolueno” un compuesto orgánico inventado por un químico alemán en 1863 y que por entonces se lo utilizaba como colorante amarillo-ocre.
Fue un tiempo después que se lo empezó a utilizar como explosivo y si peinas canas como me pasa a mí, te acordarás del correcaminos, el coyote y los cartuchos de TNT.
Algo que tal vez no sepas es que también se lo llama “trotyl” al TNT y, recuerda ese nombre por un momento.
La siguiente situación ocurrió el último año del secundario, casi al recibirnos.
Por aquella época cuando finalizábamos el curso debíamos rendir todas las materias tal como se lo hace en la universidad.
Era así porque nuestro colegio depende directamente de la Universidad Nacional de Cuyo.
Una excelente preparación propedéutica.
Cuando estábamos por rendir uno de los exámenes finales repasábamos con un compañero las distintas formas de multiplicación de las plantas, preparación de sustratos, preparación del campo para cultivo, fertilizantes, insecticidas y herbicidas.
Simulábamos estar frente a los profesores respondiendo posibles preguntas.
Uno preguntaba y el otro respondía.
Cuando llega mi turno de preguntar, le digo a Joaquín (no es su verdadero nombre) que me hable de la propagación por estacas y las represente en el pizarrón.
Hace los dibujos y empieza a explicar.
Pero, la representación de dos, eran muy parecidas entre sí.
La de muletilla y la pata de cabra.
La primera te la conté ayer, la segunda sigue el mismo principio de dejar parte de la madera de dos años para brindar más sustancias de reserva.
El nombre lo recibe porque cuando se la prepara se deja una porción muy pequeña de la madera más vieja.
Parece así una pata de cabra. Aunque si me lo preguntas, creo que se asemeja más al vaso de un caballo, pero no le puse yo el nombre.
Seguimos repasando y le planteo una situación en la que debería preparar un lecho de siembra eliminando las plantas existentes que mal llamamos “malezas”.
Eran otras épocas, y por entonces los herbicidas eran moneda corriente.
Comienza aplicando un herbicida muy potente, el trotyl.
Y es en ese preciso momento en el que no puedo parar de imaginar la situación y termino riéndome de la respuesta.
Joaquín me mira sorprendido sin saber qué ocurría.
Le repetí la pregunta para verificar, porque tal vez había escuchado mal.
De nuevo “trotyl”, y más plantas volando por los aires en mi imaginación.
Cuando ya no pude más, le conté que estaba cambiando el nombre del herbicida de contacto elegido.
Es “Totril”, y pertenece a un laboratorio muy conocido.
Ya pasaron muchos años desde aquel momento y vaya a saber cuántas burradas he dicho yo que no recuerde.
Y otras que sí pero las contaré otro día.
Claudio. El Jardinerista